El Papa Francisco, el argentino Jorge Mario Bergoglio murió la madrugada del lunes, a los 88 años, por un derrame cerebral, casi un mes después de salir de una larga hospitalización por problemas respiratorios.
El ataúd abierto del papa, llevado en procesión a hombros por los ‘sediarios’ pontificios y escoltado por la Guardia Suiza, llegó a la basílica de San Pedro y fue colocado el Altar de la Confesión, donde los fieles disponen de unos instantes para ver por última vez a Francisco.
Se dispuso que entre miércoles y viernes el ataúd con su cuerpo permanezca en la Basílica de San Pedro para que quienes así lo deseen, acudan a despedirlo.
El Vaticano baraja ampliar hasta después de la medianoche el horario para que los fieles puedan despedirse del papa Francisco en la basílica de San Pedro, que acoge su féretro desde este miércoles hasta el funeral del sábado.
“En consideración de la elevada afluencia de fieles que desean rendir tributo al Santo Padre, no se excluye la eventualidad de ampliar la basílica vaticana a más del horario establecido de las 24:00 horas”, informó la Santa Sede en un comunicado.
Preparativos especiales
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, rindió este miércoles tributo al papa Francisco al pasar ante su féretro en la basílica de San Pedro del Vaticano, donde permanecerá expuesto hasta el día de su funeral, el sábado.
Meloni, completamente vestida de negro, llegó ante el ataúd, custodiado por cuatro guardias suizos ante el baldaquino vaticano, y rezó unos instantes ante el cuerpo del pontífice argentino.
Leobardo Guevara esperó más de cuatro horas para despedirse del papa Francisco en la basílica de San Pedro. Fueron pocos segundos, pero le dejaron una “sensación de paz”.
En este primer día de capilla ardiente, decenas de miles de creyentes y turistas aguardaban en una calurosa jornada primaveral antes de poder dar su último adiós a su líder espiritual.
“Se siente una sensación de paz. El padre fue una persona muy humilde, que Dios lo tenga en su gloria”, confiesa emocionado el joven de 26 años, que luce una bandera de su México natal sobre su ropa deportiva negra.
Miles de personas caminan por el pasillo central de la basílica de San Pedro para presentar sus últimos respetos al papa Francisco, al inicio de tres días de velatorio público antes del funeral del pontífice.
Multitudes de fieles avanzaron lentamente hacia el altar principal de la basílica del siglo XVI, donde el sencillo ataúd de madera de Francisco estaba colocado en una rampa inclinada, mientras cuatro guardias suizos permanecían firmes. En los próximos días se espera que decenas de miles de personas pasen por la basílica, y el Vaticano anunció que podría dejarla abierta después de la medianoche debido a la gran cantidad de fieles.
La basílica de San Pedro del Vaticano cerrará su Puerta Santa, cruzada por los peregrinos en este Año Santo, durante la mañana del sábado por el funeral del papa, y lo mismo hará la de Santa María La Mayor, donde será sepultado.
Los peregrinos que lleguen a Roma por el Jubileo podrán cruzar la Puerta Santa de San Pedro, abierta solo durante periodo jubilar, desde hoy y hasta el viernes, también para despedirse del papa Francisco, cuyo féretro ha sido expuesto en la basílica vaticana.
La muerte del papa Francisco ha disparado el precio de los vuelos y los hoteles en Roma, la ciudad que recibe en estos días a decenas de miles de fieles para despedirse del pontífice y asistir a la elección de su sucesor.
En el caso de España, fuentes de la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) han explicado a EFE que miles de personas están viajando a Roma por el Año Jubilar -que se celebra desde el 25 de diciembre de 2024 hasta el 6 de enero de 2026- y avanzan que podrían producirse aumentos adicionales para los actos de despedida del papa.
Dispositivo especial de seguridad
Italia ha puesto en marcha un dispositivo de máxima seguridad ante el funeral del papa Francisco que se celebrará el próximo sábado en la plaza de San Pedro del Vaticano, donde se esperan más de 200 mil fieles y numerosos jefes de Estado y de Gobierno, por lo que se desplegarán en Roma cuatro mil policías y se extenderá una zona de exclusión aérea.
Cientos de agentes y miembros de la protección civil están ya presentes en torno al Vaticano para controlar el tráfico y guiar el alto flujo de personas que se dirige a la basílica de San Pedro para despedirse de Francisco, después de que este miércoles se llevara su cuerpo para ser expuesto en el templo hasta el viernes.
Unos dos mil carabineros -policía militarizada-, así como agentes de la Policía de Estado y Guardia de Finanzas ya han sido desplegados, según el Ministerio del Interior. También hay cientos de agentes y patrullas de la Policía local de Roma, que ampliarán su presencia hasta dos mil efectivos entre el viernes 25 y sábado 26 de abril.
Antes de su muerte, el pasado lunes, el papa Francisco realizó una donación personal de 200 mil euros destinada a los presos, en lo que eran “sus últimas posesiones”, aseguró este miércoles el obispo Benoni Ambarus, director de la oficina para la pastoral carcelaria y encargado de asuntos caritativos en Roma.
“Les donó 200 mil euros de su cuenta personal”, dijo Ambarus en declaraciones a prensa italiana este miércoles.