El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció este domingo que investigará la respuesta policial al tiroteo en una escuela de Uvalde (Texas), en el que el pasado martes murieron 19 niños y dos maestras.
En un comunicado, el portavoz del Departamento de Justicia Anthony Coley, anunció la investigación, cuyos resultados serán públicos y que se abre a raíz de una petición del alcalde de Uvalde, Don McLaughlin, después de que la actuación de la Policía haya sido duramente cuestionada por su aparente lentitud.
El tiroteo dejó 19 menores y dos adultos fallecidos. El agresor, Salvador Ramos, fue abatido. Las autoridades pidieron a los padres con hijos desaparecidos hacerse pruebas de ADN, dado que el estado en que quedaron los menores hacía, en muchos casos, imposible que fueran identificados.
“¡Entren ahí, entren ahí!”, clamaba una mujer, afirmó Juan Carranza, de 24 años, quien observaba los hechos desde una casa al otro lado de la calle.
El director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steve McCraw, dijo que trascurrieron entre 40 minutos y una hora desde que Salvador Ramos abrió fuego hasta que los agentes lo detuvieron.