La sonrisa de Guillermo Ochoa no pudo ser completa, pero sí tuvo un gran motivo para estar contento: Volvió a ser el héroe de la Selección Mexicana en una Copa del Mundo.
El portero del Tricolor asegura que el penalti atajado al astro Robert Lewandowski se debió a que hubo trabajo previo al estudiar al atacante polaco.
“Hubo un trabajo detrás. La vida es así de caprichosa. Hacía rato que no atajaba un penalti, y ahora tocó”, afirmó el guardameta, a Televisa. “Se lo dedico a un amigo del que su padre falleció ayer y quería estar con él”.
La imagen de Ochoa al atajar ese penalti ya se volverá un clásico instantáneo del Tricolor, al igual que aquella gran atajada contra Neymar en Brasil 2014.
“Cuando uno es niño, quiere jugar Mundiales y hacer historia. Es un buen recuerdo, pero queremos hacer historia como grupo”, sentenció.
Es cierto que la Selección Mexicana no ganó, pero Ochoa pide valorar la unidad, de cara a los choques contra Argentina y Arabia Saudita.
“Es un punto, sumamos”, recordó. “Ellos tienen a muy buenos jugadores, tienen prestigio; queríamos los tres puntos y vienen partidos complicados. Si jugamos así, estaremos cerca de ganar”.