Antes de iniciar el entrenamiento de Chivas, el equipo hizo un paseíllo, esperaron a que entrara Ricardo Peláez junto a su hijo, quienes eran acompañados por el presidente Amaury Vergara.
Una vez en posición, comenzaron a pasar los Peláez, les dieron pamba, manotazos, una que otra patada cómo festejo, debido a que se renovó contrato con Chivas.
Así es, los Peláez estarán más tiempo al frente de Chivas, el consejo que apoya a Amaury determinó darle continuidad al proyecto en busca de los objetivos trazados, pese a que en el actual torneo esté el Rojiblanco, buscando meterse a la respesca.
El siguiente paso es esperar a entrar a la eliminación de repechaje, pelear por el título, mientras Peláez y sus allegados, terminan de planificar el torneo entrante.