Texas debe eliminar 1.000 pies de barrera flotante a lo largo del Río Grande destinada a impedir que los inmigrantes crucen ilegalmente cerca de Eagle Pass, dictaminó el viernes un tribunal de apelaciones de Estados Unidos. Según Fox News Texas, la decisión se tomó cuando la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos en Lukeville, Arizona, al suroeste de Tucson, decidió cerrar su puerto de entrada luego de verse abrumada por los inmigrantes que ingresaban al estado.

La decisión 2-1 de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos con sede en Nueva Orleans en Texas, en la que confirmó el fallo de un juez federal, fue vista como una victoria para la administración Biden. El Departamento de Justicia de Estados Unidos demandó a Texas en julio, alegando que las boyas colocadas en el bloque de navegación del río no son seguras y violan la Ley de Apropiación de Ríos y Puertos, que requiere la aprobación del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos para aguas navegables.

En septiembre, el juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, David Ezra, ordenó a Texas que eliminara las barreras. El gobernador de Texas, Greg Abott, calificó la decisión del viernes como “claramente equivocada”.

“La denegación del Tribunal de Apelaciones del Quinto Cir. de la autoridad soberana de Texas para asegurar la frontera con barreras marinas flotantes es claramente errónea”, escribió en X, anteriormente Twitter. “El fiscal general Paxton y yo solicitaremos una nueva audiencia inmediata ante todo el tribunal”. Añadió que acudirían a la Corte Suprema de Estados Unidos si fuera necesario para “proteger a Texas de las fronteras abiertas de Biden”.

Eagle Pass es parte de un sector de la Patrulla Fronteriza que ha visto el segundo mayor número de cruces de migrantes este año fiscal. En Arizona, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos dijo que está “aumentando todos los recursos disponibles para procesar a los migrantes de manera expedita y segura” en Lukeville y “continuará priorizando nuestra misión de seguridad fronteriza según sea necesario en respuesta a esta situación en evolución”.

Se espera que el cierre temporal de la frontera comience el lunes para que los funcionarios puedan procesar a los migrantes que ya cruzaron por el puerto de entrada, ya que se ha convertido en una ruta migratoria importante en los últimos meses. La mayoría de los inmigrantes atraviesan huecos en el muro fronterizo en la zona en busca de asilo y los traficantes están dejando cada vez más a inmigrantes de países como China, India y Senegal en la zona.

“Estados Unidos continúa viendo mayores niveles de encuentros de migrantes en la frontera suroeste, impulsados ​​por contrabandistas que venden desinformación para aprovecharse de personas vulnerables y alentar la migración”, dijo la CBP en un comunicado a principios de esta semana. “A medida que respondemos con recursos adicionales y aplicamos consecuencias por la entrada ilegal, las tendencias migratorias también cambian. Continuamos ajustando nuestros planes operativos para maximizar los esfuerzos de aplicación de la ley contra aquellos no ciudadanos que no utilizan vías o procesos legales como CBP One”.

En octubre, 3.140 personas condujeron hasta el cruce y 184 peatones entraron cada día, según el Departamento de Transporte de Estados Unidos. La gente todavía puede cruzar por Nogales y San Luis, Arizona, tres horas al este y dos horas al oeste de Lukeville.

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