El desconocimiento que existe sobre los beneficios de los que nos provee la Vitamina D (VitD) ha generado un problema de salud pública que, lamentablemente, se mantuvo inadvertido hasta alcanzar cifras preocupantes, ya que más del 80% de la población carece de los niveles óptimos de esta sustancia y su deficiencia podría desencadenar un sinnúmero de patologías tales como la osteoporosis, diabetes, artritis reumatoide y un riesgo mayor de sufrir fracturas.
Por ello, la “Brigada D”, conformada de una tríada de investigadores argentinos, se dio a la tarea de exponer la importancia de esta vitamina y sus implicaciones en la vida humana, en entrevista.
La doctora Beatriz Oliveri, también conocida como “la madre de la vitamina D”, expresó que la VitD es una hormona que se produce fotosintéticamente en la piel por acción de la radiación ultravioleta (el Sol). Si bien -ahondó la médica ensitometrista- se encuentra en algunos alimentos, su distribución rica en esta vitamina es casi mínima. Algunos de estos productos son pescados grasos, el huevo y algunos lácteos suplementados, enriquecidos con calcio.
La también investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) indicó que su presencia favorece en la salud músculo-esquelética: “favorece a un esqueleto sano y una buena función muscular”. Los altos niveles de Vitamina D previenen el raquitismo, osteomalacia (huesos blandos y deformes) y la osteoporosis. Sin embargo, el acceso a los rayos solares, en contemporaneidad, no es sencillo de obtener.
“La vida moderna hizo que nuestros hábitos cambiaran, nuestro trabajo -las principales horas donde podemos estar expuestos al Sol- habitualmente estamos en espacios cerrados, nuestra vestimenta, los protectores solares, los cosméticos con protecciones solares, de manera tal, hace que cada una de las personas padezca deficiencia de Vitamina D”, destacó uno de los expertos.
“Si tenemos buenos niveles de Vitamina D circulante tendremos acciones extraesqueléticas”, aseguró la científica, ya que estas se encargan de modular a todo el sistema inmune, por lo que nos protegen contra infecciones, como fue el caso del Covid-19. Durante su aparición (a finales de diciembre de 2019) y en el curso de las diferentes olas de contagios, la evidencia científica relacionada con la VitD llamó la atención de las poblaciones, pues si bien, las noblezas de esta vitamina ya se encontraban ahí, nadie las volteó a ver hasta que se comprobó que su presencia evitaba las complicaciones de la enfermedad.
“Por eso es tan importante que si no los obtenemos naturalmente, lo hagamos a través de los suplementos adecuados”, agregó Oliveri. “Toda nuestra atención giró alrededor de la pandemia de Covid-19, pero resulta ser -que en esta misma época- que las investigaciones ratificaban que la mayoría de la población tiene deficiencia de Vitamina D”.
Una demostración de ello, fue la demanda de suplementos de Vitamina D en México, durante la contingencia se registraron ventas históricas con respecto a las ventas, que se mantuvieron estables a lo largo de cuatro meses: “se empezaron hacer públicos estudios en los que se hacía referencia que los pacientes con deficiencia de VitD tenía peores pronósticos frente al nuevo coronavirus”. Pese a esto, la comercialización de estos productos cayó al cabo de un tiempo y la población la olvidó.
En este respecto, el ginecólogo y obstetra David Fasuro expresó que los suplementos de VitD es una estrategia de medicación segura y efectiva: “los beneficios superan amplísimamente a los riesgos, tiene un gran rango de seguridad, es muy difícil tener efectos adversos si está indicada dentro de los parámetros habituales”.
Para estos efectos, el director médico del Instituto Ginecológico Buenos Aires, expuso la trascendencia de individualizar la medicina, pues la administración idónea de dosis de VitD varía dependiendo de la necesidad de cada paciente. “La medicina basada en la necesidad de la persona. Hay que tener en cuenta cuál es su enfermedad, patologías, cuál es su riesgo para poder indicar una buena estrategia”. Lo que es un hecho, de acuerdo al experto, es que este suplemento debe ser tomado con confianza, gracias a los beneficios que otorga a la salud.
A su vez, el especialista en osteología, José Luis Manseur respondió al cuestionamiento de por qué la VitD es necesaria ahora y antes no, ya que ni nuestras madres, ni padres, aún menos nuestros abuelos la tomaban: “incorrecto, no se sabía, pero siempre fue necesaria”. La única etapa en la que, quizá, estos suplementos no fueron requeridos -dimensionó el investigador- fue en la era de la humanidad primitiva, pues la privación de ropas y ubicados geográficamente cerca del Ecuador, cercanos al Sol, “sólo que nos enteramos ahora”.
La vitamina D, profundizó Fasuro, tiene la doble acción, es preventiva y útil en el tratamiento de patologías ya manifestadas en la o el paciente: “sirve para prevenir, corregir y revertir”, aseguró.
melc
