El gobernador Tim Walz visitó una escuela primaria en Fridley, Minnesota, el miércoles para explicar el impacto que los planes del presidente Trump para desmantelar el Departamento de Educación de EE.UU. tendrían en los estudiantes y sus familias, de acuerdo con CBS News.
El martes, el Departamento de Educación anunció que reducirá su fuerza laboral en casi un 50%. La agencia tiene numerosas responsabilidades, como hacer cumplir las políticas contra la discriminación en las escuelas, distribuir ayuda financiera federal para la educación y recopilar y difundir datos e investigaciones sobre el sistema escolar.
Los fondos del departamento representan menos del 10% del financiamiento de las escuelas públicas del país, que depende principalmente de impuestos estatales y locales. Según Walz, Minnesota utiliza estos fondos federales para proporcionar recursos a estudiantes con discapacidades, programas de aprendizaje temprano, acceso a banda ancha, transporte, educación técnica y profesional, así como capacitación docente.
“Si solo vieras un aula rodeada de niños de segundo grado, ansiosos por aprender, rodeados de profesionales que han dedicado su vida y educación a estar allí para nuestros niños y que además entienden la ciencia del aprendizaje para ofrecer una enseñanza efectiva a todos los estudiantes”, dijo Walz en una conferencia de prensa el miércoles.
Se espera que Trump emita una orden ejecutiva para instruir a la secretaria de Educación, Linda McMahon, a iniciar el proceso de disolución del Departamento de Educación, según fuentes informadas por CBS News la semana pasada, aunque el momento exacto de la medida aún no está claro.
“Nuestra misión principal, como hablamos en las escuelas, es asegurarnos de que cada niño tenga la oportunidad de aprender. Está en nuestra constitución en Minnesota”, dijo Walz. “De hecho, se remonta a la fundación de este país. Uno de los grandes logros que hemos tenido son las escuelas públicas y el reconocimiento de que no existe un modelo único para todos los estudiantes.”
Eliminar el departamento, algo que Trump prometió hacer durante su campaña, requeriría la aprobación del Congreso. Aunque los republicanos tienen actualmente mayoría en ambas cámaras, la medida necesitaría 60 votos en el Senado, lo que hace improbable que suficientes demócratas se unan al Partido Republicano para aprobarla.
“Sí, se gasta dinero aquí [Departamento de Educación], porque esto es nuestro futuro”, afirmó Walz.